El terciopelo negro de la habitación descubre tu piel por primera vez. Cierra los ojos, abre el alma.Energías desbordadas que anhelan explotar. El cuerpo se contrae, el corazón se agita, la sangre fluye como manantial. Aún estas viva, de eso no hay duda. Canta, grita, llora, el éxtasis es evidente en cada poro de tí. Después de largas noches de agonía la catársis ha llegado para sanar. Abre las manos, juega con el presente olvidado, bañate de deseo. Desprende las dagas profundas que permean la mente. Libera la pasión que refleja tu mirada. Toca el cielo con la mano, alcanza las estrellas con un dedo.Arráncale a la vida un instante de felicidad y embriagate de su olor sólo una noche más
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