Invadió su carne

Con la luz apagada, ella se buscó en la cama.Caricias por simple placer. Deslizó sus suaves dedos y encontró su vientre. Lentamente bajo hacia su negro pubis. Jugó con sus vellos crecidos. Abrió sus largas piernas. Separó sus labios bajos. Los acarició con ritmo. Por un instante calmó su ardor. Ensalivó su dedo medio. Lo introdujo en su orificio mojado. Caló muy hondo su excitación. Con el sudor resbalando por sus pechos. Tomó con fuerza su pezón izquierdo. Lo endureció en segundos. Su vagina goteó. Con los ojos cerrados imaginó a su adorador perpetuo. Deseó desgarrar su sexo. Lubricarse como nunca. Complacerse sin inhibición. Apretó los muslos. Oprimió varias veces usando dos dedos. Hirvió su vulva.Atrapó el falo imaginario. Gimió como bestia. Ahogó sus gritos. Apretó las nalgas. Se dilató con un dildo. Invadió su carne. Estimuló su clítoris.Escurrió su pasión. Convulsionada arañó sus húmedas paredes. Chorreó su liquido transparente. Tomó un poco con la mano.Saboreó sus jugos. Almacenó su aroma en la boca. Endulzó sus labios. Frenéticamente movió sus caderas. Suplicó su muerte. Trastocó su delirio. Casi al caer el alba derramó sus ansias. Se vino sobre las sábanas. Empapó su cuerpo. Se abandonó a la suerte.Exhaló mil veces.Después desapareció....